[95] Vinos : Olvena Somontano Gewürztraminer 2009

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Como se acerca la época estival (es un decir, ahora es verano desde marzo), hoy recomendaré, como casi todos los años, un buen blanco para el veranito; Olvena Somontano Gewürztraminer 2009.

Este nombre impronunciable, viene de la variedad de uva con la que está hecho. La  Gewürztraminer, procede del norte de Italia, aunque, en realidad se cultiva en casi todo centro Europa. En cualquier sitio de clima frio, y de un tiempo para acá, también en ciertas zonas vitivinícolas de nuestro país, por ejemplo, en la zona del Somontano (Huesca), donde el clima le va a la uva. 

Es el primero que pruebo, pero por lo que he leído de las notas de cata (de otras procedencias y bodegas), para mi, no tiene nada de vino afrutado/dulce, es más bien, de base cítrica (con una acidez muy peculiar). Pero lo dicho, según las catas en otras zonas (Austria, Hungría, Checoslovaquia, Italia, etc), el vino se engloba dentro de los afrutados, e incluso dulces y espumosos. En fin, supongo que será el aporte del "terruño".

Por lo tanto, me esperaba un vino más fácil, es decir, afrutado y ligero, no obstante, aún no siendo así,  resulta muy fresco y agradable al paladar. Digerible pese a la graduación y, con pocos efectos secundarios, lo que denota que la uva, supongo beneficiada por el clima, no requiere de tantos tratamientos fitosanitarios, como en otras zonas vitivinícolas, donde, más que producir vinos, producen dolores de estómago y cabeza (veneno incluso).  

En fin, que es una variedad sorprendente, y a seguir, ya que, incluso en ciertas zonas se produce como vino espumoso/frisante, lo que dada su acidez, lo haría muy interesante como "espumoso" (por lo regular dulces e incluso secos, cosa que a mi particularmente no me va y, en cambio con un toque de acidez y frescura, resultaría más que interesante). Será cuestión de ir buscando. 

Lo único malo, su precio, al menos aquí en España, no baja de los 12-15 euros botella (en distribuidor, a saber lo que te trincan en mesa), pero teniendo en cuenta que es un vino blanco (qué aguanta bien en botella) y  que apetece en época estival, pues eso, que un capricho, es un capricho, y más, cuando lo que se supone que estás tomando con él, es un plato de cierta entidad. Los vinos son como los zapatos, un mal blanco, arruina un buen marisco. La mesa se empieza a vestir con el vino y el pan. Primero un buen zapato, y luego lo demás.