Four million steps

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Pues eso, que poco antes de un año después ya he sumado otro millón de pasos a mi cuenta kilómetros particular. Si el año pasado acumulaba lo equivalente de ir de Finisterre a Moscú, ahora voy a por Pekín (cuantitativamente hablando).

Lo malo de la constancia y por tanto rutina, es que acabas por perderle el gustillo a la cosa (sea cual sea), y con esto ocurre un poco lo mismo, que dejando a un lado el beneficio indirecto que buscas (una buena salud), te tienes que reinventar estímulos que te "obliguen" a mantener esa constancia en el tiempo.  

En mi caso, ya harto de patear la playa, pues se me ha dado por el senderismo de montaña, fluvial, etc. Al final, es lo mismo, quizás más aeróbico (hay más desnivel, esfuerzo, etc), pero lo que busco es sustituir una distracción, es decir, si antes la -RECOMPENSA- que tenía era escuchar música, podcast, etc..., y por ende, relajarme mientras caminaba, ahora, pese a seguir siendo un devoto de los auriculares, necesito más. Un paisaje fluvial, menos monotonía, incluso caminar en compañía (a veces), hacer trayectos variados (rutas de senderismo hay para aburrirse), etc., es decir, lo que intento explicar, es que, para mantener una constancia debes recibir una recompensa, de no ser así, -el método- deja de ofrecer resultados, ya que recordemos que más que andar y hacer ejercicio, el beneficio principal que se deben perseguir, es la relajación (para el tema de la espalda), de no ser así, caminarás, harás ejercicio  y tal y cual, pero no te evades, no te relajas y aquello se convierte en una obligación.

Véase también:
Hérnida discal
un millon de pasos
dos millones de pasos
tres millones de pasos
Step by step to Moscow