efectos secundarios

No desayuné pensando en ti,
no almorcé pensando en ti,
no cené pensando en ti,
y no dormí porque tenía hambre.

Inzitan blog

Debí elegir la pastilla azul...

Hace siglos, en Delf, ¿recuerdas?, tú vertías la jarra de leche, en casa de Johannes Vermeer, el pintor, el marido de Catharina Bolnes, hija de la señora María Thins, aquella estirada, que tenía un hijo medio loco. Pues ese, ese era yo...

2 comentarios:

Kike6:19 a. m.
Soy otro sufrido que experimenta los mismo síntomas que comentas. No desayuno, no almuerco y casi no ceno y no duermo. Son las 6:17 de la mañana y aún continuo dado vueltas en la cama.
¿Que coño es esta mierda que me han inyectado? He leído que tiene algo de antidepresivos...joder...
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Inzitan blog10:26 a. m.
Por lo que me he enterado, en teoría debiera ser así, que ocurre que ciertos individuos (entre los que por lo visto nos encontramos) sufren el llamado efecto espejo o simpático como ellos dicen que es reaccionar de forma opuesta a un efecto, es decir... a nosotros ese componente en vez de deprimirnos nos acelera...
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